1. Rodajas de pera con mantequilla de maní
La combinación de pera y mantequilla de maní es un clásico súper simple. Un tentempié satisfactorio con una textura pecaminosamente cremosa y un sabor más dulce que el dulce, repleto de proteínas. ¿Listo?
- Cortar una pera en rodajas de 1 cm de grosor y quitarle el centro.
- Unte un poco de mantequilla de maní en cada rodaja de pera.
- Espolvorea con canela y polvo Choco Chill. ¡Atender!
Con una cantidad importante de fibra, antioxidantes, vitaminas y minerales, las peras son una fruta potente. La mantequilla de maní, por otro lado, es principalmente proteína y contiene varios nutrientes, incluidas vitaminas esenciales, magnesio, cobre y grasas saludables.
2. Palitos de verduras con hummus
Tener verduras y hummus a mano es una excelente manera de disfrutar de un refrigerio abundante y bajo en carbohidratos en un instante. Es más, los coloridos palitos de verduras con un delicioso hummus suelen ser un éxito entre los niños pequeños.
- Cortar las verduras en palitos. Buenas opciones incluyen zanahorias, pepinos, pimientos, guisantes y tomates cherry.
- Coloque los palitos de verduras en una fuente para servir o cree tazas individuales.
- Coloque el hummus en un tazón pequeño y agregue una cucharada de Green Boost para obtener beneficios adicionales para la salud y muchas bondades. ¡Servir y disfrutar!
Los palitos de verduras son bajos en calorías, ricos en fibra y cargados de vitaminas y minerales. También contienen antioxidantes que reducen la inflamación. El hummus es una buena fuente de fibra, rico en proteínas de origen vegetal y naturalmente rico en grasas saludables.
3. Dátiles con mantequilla de nueces en verano
No puedes evitar amar la simplicidad de este refrigerio.
- Con un cuchillo, corte 2 o 3 dátiles a lo largo y quíteles los huesos. Coloca los dátiles deshuesados en una bandeja.
- Unte la mantequilla de nueces de su elección sobre los dátiles y cubra con sal en escamas.
- Congela los dátiles hasta que se endurezcan.
- ¡Saca del congelador y disfruta!
Este delicioso refrigerio contiene dos alimentos ricos en nutrientes. Tanto los dátiles como las mantequillas de frutos secos son ricos en fibra, minerales y vitaminas. Además, los dátiles contienen antioxidantes que combaten enfermedades, mientras que las mantequillas de nueces están repletas de proteínas. Algunas opciones populares de mantequilla incluyen maní, almendra, nuez, nuez, pistacho y anacardo. Pruébalos todos y compara sabores.
4. Helado de plátano
Con más fibra y menos azúcar que el clásico helado de lácteo, este helado casero de plátano es una alternativa saludable a cualquier edad. El helado de plátano, una delicia congelada básica, contiene la fruta del plátano repleta de potasio. El potasio es uno de los minerales más importantes del cuerpo y ayuda a regular las contracciones musculares, el equilibrio de líquidos y las señales nerviosas. Los plátanos también son ricos en fibra, pero bajos en calorías.
- Pela y corta en rodajas 2 plátanos maduros. Coloca las rodajas en una bandeja o plato muy grande y congela durante 1-2 horas.
- Una vez congeladas, coloca las rodajas de plátano en un procesador de alimentos y agrega un poco de cacao y agua o leche vegetal.
- Con un procesador de alimentos, presione la mezcla de plátano, leche vegetal y agua hasta que quede suave como un helado.
- Pon el helado en un bol, cubre con nueces picadas o chocolate vegano y sirve. Alternativamente, puedes congelar el helado hasta que esté lo suficientemente duro como para sacarlo antes de agregar los aderezos.
Los plátanos son un excelente refrigerio para llevar, pero ¿por qué no convertirlos en un capricho saludable? ¡Helado de plátano para toda la humanidad!
5. Galletas en rodajas de manzana
A veces los mejores snacks son los más fáciles de preparar. Aunque el nombre de "cookie" puede sugerir lo contrario, las galletas con rodajas de manzana son un ejemplo de ello.
- Cortar una manzana en rodajas de 1 cm de grosor.
- Unte la mantequilla de nueces de su elección sobre las rodajas de manzana.
- Cubra con almendras (en hojuelas, picadas, enteras), hojuelas de coco y arándanos secos o semillas de calabaza. Como regalo extra, cubre las galletas con botones de chocolate vegano.
Tanto las manzanas como las mantequillas de nueces son ricas en nutrientes que brindan muchos beneficios para la salud. Desde antioxidantes hasta fibra, vitaminas y minerales, este snack lo tiene todo.
6. Snack de tarta de yogur vegano
Con muchas proteínas, minerales, vitaminas, fibra y grasas saludables, el pastel de yogur vegano es una prueba de que una alimentación saludable no tiene por qué ser complicada.
- Mezcle 1 ¼ de taza de yogur griego de origen vegetal con una cucharada de proteína en polvo de su elección (la proteína en polvo es opcional).
- Extienda la mezcla sobre una bandeja para hornear forrada o un plato grande.
- Agrega un topping de tu elección a la mezcla. Nosotros recomendamos:
- granola (mira esta receta de granola con sabor a chocolate elaborada con nuestro Choco Chill)
- rodajas de plátano, frambuesas o arándanos
- almendras picadas
- Derrita el chocolate vegano al 70%, rocíelo encima y colóquelo en el congelador.
- Una vez congelado, córtalo en trozos y disfruta. Puedes guardar los trozos sobrantes en un recipiente en el congelador.
Este pastel fresco es un refrigerio rico en proteínas especialmente excelente para el verano.